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El lanzamiento al mercado de un DVD cuádruple conteniendo las 16 horas de la interpelación parlamentaria a Sandra Mendoza, concretado mediante un convenio entre el gobierno de la provincia, el cineasta Leonardo Favio y la Librería de la Paz, resultó todo un éxito. En medio día, los primeros 40.000 videos desaparecieron de las góndolas.

"En cierta forma lo veíamos venir. La exposición de la ministra de Salud, comprimiendo en apenas doce horas todo lo actuado frente a la epidemia del dengue, ya había sido seguida por los chaqueños a través de radio, televisión y portales de noticias. Incluso nos enteramos que hubo gente que iba mandando cada tanto telegramas a sus familiares de zonas rurales, contándoles cómo iba la sesión en la Legislatura", comentó el titular del Instituto de Cultura del Chaco, Francisco "Tete" Romero.

El DVD, elaborado como un documental, tiene elementos muy interesantes, que no estaban al alcance del ciudadano común el día de la interpelación. Por ejemplo, hay un backstage de los preparativos de Mendoza antes de ir a la Legislatura, donde se la ve bajando decenas de hojas de la cyber-enciclopedia Wikipedia para agrandar las dos carillas que ella tenía escritas sobre la actuación oficial ante la epidemia de dengue.

Gracias a eso, lo que hubiera sido una exposición de 8 minutos, terminó siendo un informe récord de una docena de horas, que permitió destruir las reservas de energía de los diputados de la oposición, que así a la hora de tener que preguntar ya no lograban hilvanar dos ideas (en realidad, tampoco lo habían logrado antes de la sesión).

El material extra que trae el DVD incluye también los preparativos en el lado de la Alianza. Se ve en ese capítulo a los diputados Miguel Melar, Oscar Dudik y Eduardo Siri hablando con cuatro lanzallamas que tenían la misión de entrar en determinado momento en la sesión e incinerar al subsecretario Marcelo Slimel, como un modo de sacar de las casillas a Mendoza y provocar así un escándalo que fuera reproducido por los canales de la TV porteña. Pero los operarios se durmieron escuchando a la ministra, lo que frustró la operación.

Tampoco faltan las perlas que pasaron inadvertidas para los medios que hicieron la cobertura de la interpelación, como es el caso de un grupo de babosas embarazadas que asistieron a la sesión y desplegaron una pancarta que decía "Sandra, no te preocupes que te vamos a esperar lo que haga falta. Vos seguí a tu ritmo".