Cuando éramos pendejos, la tele era en blanco y negro (sÃ, chicos, en serio, la tele no se veÃa con todos los colores) y la programación arrancaba al mediodÃa (en épocas de malaria empezaba a las seis de la tarde) y cerraba a la medianoche sà o sÃ.
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Las series televisivas eran el comentario obligado al dÃa siguiente. HabÃa de todo. Por ejemplo:
La familia Ingalls: Al principio, Charles Ingalls te caÃa bien. Después ya tenÃas ganas de que en algún capÃtulo lo agarrara un asesino serial y lo descuartizara.
No por malo, sino porque ya era el colmo de perfecto: nunca la puteaba a la mujer, jamás le sacudÃa un tongo a los hijos, no coimeaba al sheriff del pueblo, sus nenes ayudaban hasta a levantar un galpón y Charles no intentaba mandársela a guardar a la maestra del lugar.
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El hombre nuclear: Te impresionaba la fuerza del tipo, pero al final te cansabas de esperar que se la empomara a La Mujer Biónica.
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Daktari: A los cinco años te encantaba ver al león Clarence, a los siete te divertÃa mucho la mona Judi, a los nueve admirabas el amor de Daktari por los animales y a los once te matabas a manuelas por Paula, la hija del médico, que tenÃa un orto in-cre-Ã-ble.
Jake, el asistente de Daktari, te parecia un reverendo pelotudo, porque la tenÃa servida y nunca se la clavaba.
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Kung Fu: Wang Chang Kane estaba lleno de sabidurÃa. Pronunciaba pensamientos geniales sobre la prudencia, el respeto y el sentido de la vida.
Pero la verdad es que lo único que todos esperábamos era que los "malos" lo calentaran de una vez para poder ver cómo los recontracagaba a patadas.
Mucho sentido universal, pero bien que al guacho le gustaba amasijar gente.
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La Mujer Maravilla: Creo que nadie recuerda bien de qué se trataba, porque todos nos quedábamos colgados viendo solamente las tetas de Linda Carter, aferrados a la ilusión de que un dÃa se le salieran de aquel corset dorado y quedaran a la vista.
Seguimos esperando.
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Los Angeles de Charlie: Las historias de cada capÃtulo eran una mierda, pero la serie te daba tres opciones distintas para masturbarte.
Ay, Jaclyn Smith, ¿dónde estarás hoy?
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El Crucero del Amor: VeÃas un capÃtulo y ya conocÃas todos. Parejas que subÃan al barco, se peleaban, y antes de que pasara una hora estaban arregladas y más felices que antes.
Eso sÃ, todo sin empomar ni franelear.
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Corre, Joe, corre: No la dieron mucho. La protagonizaba un perro, como a los noticieros de la región. Pero ya no sé de qué puta lo acusaban al ovejero alemán, que se la pasaba huyendo. De narcotraficante o algo asÃ.
Nos decÃan que era inocente, pero el perro tenÃa cara de estar hasta las manos.
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Bonanza: Antecedente directo de la Mesa de Enlace.
Cualquiera que la haya visto podrÃa tararear perfectamente la música de apertura de la serie.
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Flipper: DelfÃn que resolvÃa hasta asesinatos presidenciales, todo sin dejar de tener una sonrisa bien pelotuda en el rostro.
Hizo que generaciones creyeran ver guiños cómplices hasta en surubÃes.
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Batman: Para muchos, el primer antecedente de lo que más cerca en el tiempo serÃa la pelÃcula "Secreto en la montaña".
Porque no nos jodan, todos lo saben: Batman y Robin se daban.
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Cosmos 1999: No estaba mal para la ciencia ficción de la época, pero lo mejor era que todo el tiempo habÃa minas con ropa ajustada.
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BJ: El muchacho que conducÃa su camión junto al mono Bear.
Aquà también lo mejor estaba en las minas con las que histeriqueaba BJ.
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Chips: Sinceramente, hoy resulta absolutamente inexplicable entender por qué era una serie exitosa.
Dos canas de tránsito que en vez de coimear se hacÃan los langas y resolvÃan casos.
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Dallas: La más moderna de la lista, tenÃa dos atractivos centrales: la perfidia constante de JR conspirando contra hermanos, la madre o su gato, y las gomas in-cre-Ã-bles de Victoria Principal.
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Si, ya sé que faltan más, ¡pero agregalas vos, pelotudo!
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Comentarios
La verdad Ricardo me ha soprendido, para mi que el autor de articulo VEIA las serias para tener material para sus autosatisfaccio nes, que no se si era porque nadie le daba bolilla y se las tenia que arreglar solo o era muy chico entonces nadie le daba bolilla y se las tenia que arreglar solo, ahora escuchando la radio nunca me imagine que alguien se podia arreglar solo.
A mi me parece que la Mujer Maravilla es parecida a Aida Ayala
Que recuerdos! Snf snif
¿COMO PODIAN MASTURBARSE CON LOS ANGELES AQUELLOS? MAS BIEN ERAN PARA NOVIAS. PRECIOSAS PERO SUPER FLACAS. A MI ME CAUTIVABAN PERO NO ME CALENTABAN, AMIGOS Y AMIGAS. ¡ESCRIBANME CUANDO GUSTEN! FRANCISCO DE ARGENTINA
Qué lindo era juntarse entre todos los amigos a tomar la merienda y comentar los capÃtulos!
Muy buena !!!
Señor administrador: su "Aidamóvil" y el comentario sobre la mala de "V-Invasión" hicieron que devuelva como spray a mi café. Afortunadamente zafó el monitor, pero el teclado y el escritorio son una chanchada...
ADMINISTRADOR: Me alegro, Yaguá (de que lo divirtiera eso, no del enchastre)
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